domingo, 23 de abril de 2017

Mucho tiempo ha pasado desde que publiqué la última entrada. ¿Porqué? podrás decir, ni yo misma lo se. Lo cierto es que la vida va marcando su paso y nosotros lo bailamos como podemos.
Hoy, cuándo he rescatado este blog de los restos de aquel naufragio he pensado que entonces me apetecía hacerlo, y que ahora también; y que no hay razón ni excusa para no continuar donde lo dejé. Aquí estoy de nuevo, dispuesta a jugar con las palabras y las ideas y los deseos, y contigo si te animas a jugar conmigo.



El camino



 ¿Te has parado a pensar alguna vez como elegimos el camino que andamos? ¿O es el propio camino el que nos elige? Mas de una vez me he sentido atrapada a medio camino de la nada, pisando un asfalto que no reconozco y sin dirección concreta. ¿Y que hacer entonces? ¿Qué dirección tomar? ¿Nos sentamos a la orilla del camino a esperar que alguien pase y nos oriente? ¿dirigimos nuestros pasos hacia adelante? ¿o volvemos sobre los pasos recorridos por si recordamos en el trayecto quienes somos y que hacemos ahí?
¿tu que harías en mitad de la nada?... ¿Hacia donde irías?

2 comentarios:

  1. El camino hay veces que te hace un wuiebro, como ahora. Voy a volver a poner mi comentario a ver si se publica.
    Yo pensaria en los pasos que he dado para llegar hasta ahi. Pero seguiria hacia adelante, lo importante es vivir, caminar. Los cruces dan un poco de respeto, pero hay que elegir y al final te das cuenta que lo importante no es el camino, el asfalto, lo importante eres tu, da igual por donde. Tu eres el camino y tu eres la vida. Disfrutala y vivete.

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